Miedo a emprender

 
 

Hola …. ¿Cómo estás hoy?

A muchos la pandemia los ha urgido a reinventarse y otros ya traían desde hace un tiempo el deseo de empezar un nuevo camino laboral pero lo empujaban para abajo en pos de lo conocido. Hay algo que atemoriza y bloquea cuando después de un análisis prudencial de todos los aspectos del nuevo emprendimiento, persiste la inacción.

Puedes oír el podcast con este reproductor, o si prefieres la lectura tienes debajo una versión escrita. ¡Que lo disfrutes!

 
 
 

Esto me hace acordar a las seis necesidades humanas que describe mi mentor en coaching Tony Robbins:

  1. Seguridad/Certeza

  2. Variedad

  3. Significancia/Importancia

  4. Amor y conexión

  5. Crecimiento

  6. Contribución

En algún otro post voy a adentrarme en cada una de las necesidades detalladas aquí arriba. Por ahora quedémonos con la primera y la segunda. Todos necesitamos sentirnos seguros y tener ciertas necesidades cubiertas: un techo donde vivir, comida sobre la mesa, educación para nuestros hijos, trabajo. Y sin embargo, también nos gusta la variedad de las sorpresas, las mariposas en la panza, y los desafíos tolerables según cada personalidad.

Ahora piensa en esto. Hay quienes prefieren aferrarse a sus realidades actuales aunque no les satisfagan simplemente por miedo a perder lo conocido que los hace sentir seguros. Por el contrario, hay otro grupo de personas que una vez aseguradas las necesidades básicas, se inclinan hacia los riesgos, desafíos y cambios. Disfrutan la adrenalina del no saber y de probar cosas nuevas.

Tanto la primera necesidad como la segunda son neutras pero llevadas a un extremo pueden ser negativas. Si estamos aburridos con nuestra vida pero preferimos eso a la incertidumbre de empezar algo nuevo, corremos el riesgo de quedar estancados. De la misma manera, si estamos todo el tiempo variando de trabajo, pareja, ciudad, y hábitos, nos perderemos la oportunidad de madurar lo que empezamos y de saborearlo antes de saltar al próximo objetivo.

La calidad de nuestra vida depende de qué tanta incertidumbre podemos tolerar.
— Tony Robbins

Adhiero a esta idea de Tony Robbins porque como siempre digo en este espacio la certeza absoluta no existe. Podemos intentar tener nuestra vida bajo control pero ésta nos va a sorprender y si no hacemos un buen trabajo sobre sí, nos puede desestabilizar. El control es solo una ilusión, creemos que si pensamos todo hasta al hartazgo y lo analizamos desde todo ángulo nos vamos a evitar frustraciones futuras pero sabemos que no es así. El resultado del control y el perfeccionismo son el estrés y la ansiedad.

Lo importante es aprender a gestionar la incomodidad que trae aparejada cierta incertidumbre, porque aparecerá seguro, cuando empecemos a emprender. Piensa en el día que empezaste un curso o algún trabajo o hasta cuando fuiste al encuentro de alguien que empezabas a conocer. ¿No sentiste algo en la garganta, pecho, o estomago? Nombro estos lugares porque suelen ser los preferidos del miedo. Y ahora recuerda también que lo hiciste, que pudiste quedarte en esa clase, trabajo, o encuentro, y que más allá del desenlace hubo un componente que te sacó de tu zona de confort y que pudiste superarte.

En principio creo que el miedo a emprender está relacionado con:

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  1. No sentirnos lo suficiente.

  2. No sentir que seremos bien recibidos.

  3. Sentir que siempre nos falta algo – más títulos, más especializaciones, más organización, más recursos, etc.

  4. Creer que no sabemos lo suficiente.

  5. La falta de certeza que trae aparejado el cambio/lo desconocido.

  6. La inversión que necesitamos hacer y que creemos podemos perder.

  7. Desilusionar a otros con nuestra decisión.

  8. Sentir que hay que analizar aún más datos y pensar en más y más variantes.

Al miedo no lo podemos rechazar porque como ya sabemos lo que resistes, persiste. Más bien la invitación es a poder relacionarnos con éste pudiendo auto calmarnos como lo haría la persona más sabia del mundo “es normal sentirte así pero escucha la voz que te ilusiona, sigue lo que te susurra el corazón”. En vez de reaccionar con terror, hay que relacionarse con éste con mucho discernimiento. En otras palabras la psicóloga Sheryl Paul me enseñó que cuando uno se siente amedrentado y hasta espantado por sus propios pensamientos, hay que preguntarse, “¿esto viene de la voz del miedo / mi necesidad de huida o de la razón?” Es una pregunta muy sencilla que esclarece mucho. Muchas veces cuando escucho a mis clientes compartirme sus inquietudes, les hago una pregunta aún más simple, “¿es tan así?”.

Para emprender, lo que sea, tenemos que estar tranquilos, y la mejor manera de aquietarnos es mediante nuestro cuerpo, respirando profundamente, meditando y hasta haciendo ejercicio físico. Nuestra mente, en momentos de estrés, nos puede dejar atrapados en una telaraña de cuentos de lo más creativos, espeluznantes y falsos. Por eso es tan importante poder entregarse, tener fe, soltar la necesidad de saber cómo saldrán las cosas, respetar los tiempos que tienen los procesos, disfrutar el paso a paso, y reconocer que estamos dotados para eso que tanto deseamos. ¿Y si tienes un tropiezo, qué pasa? Te levantas y te sacudes porque el que hace se puede equivocar y utilizar esa situación para aprender. El que no hace, no se equivoca pero se queda añorando y con las ganas.

Optemos por el progreso y no lo perfecto, ya que este último como te decía no existe. Kristen Neff, la investigadora y pionera del concepto de auto compasión nos habla de dos clases de esta:

  1. Auto compasión tierna: aceptar lo que nos pasa y ofrecernos confort en momentos desafiantes.

  2. Auto compasión feroz: protegernos, nutrirnos, y motivarnos para la acción como lo haría una madre osa defiendo a sus cachorros del peligro o buscando la manera de alimentarlos.

Una combinación de ambos tipos de auto compasión, la capacidad de bajarle el volumen a nuestras tendencias perfeccionistas y controladoras, y la habilidad de calmar nuestro cuerpo en momentos de tensión, nos van a ayudar a aflojar los miedos que nos acechan cuando empezamos algo nuevo. Pema Chodron dice algo que uso de lema “el momento de empezar es ahora”. Y si sientes que sola/o no puedes, invierte en ti y pide ayuda para desbloquearte y salir adelante.

Espero que te haya ayudado. Si sabes de alguien que le podría venir bien este blog, invítalo a suscribirse, así tendemos puentes para ayudarnos los unos a los otros en este camino maravilloso del auto conocimiento y crecimiento personal. Recuerda que también nos puedes seguir en Spotify y Apple Podcasts como Georgina Hudson Transformational Coach.

Un fuerte abrazo ❤